Perú se encuentra inmerso en una crisis política desde diciembre de 2022, luego que el entonces presidente Pedro Castillo fue destituido ante su intento de disolver el parlamento. La vicepresidenta Dina Boluarte asumió el poder y se ha enfrentado a fuertes protestas y agitación social que alcanzaron su punto máximo en enero.
La incertidumbre política podría mantenerse a lo largo de 2023 con el consecuente impacto en la actividad económica. La recuperación económica se ha desacelerado desde finales de 2022 en medio de una alta inflación y del impacto del fenómeno del Niño.
Como positivo, luego de tres meses de paralización, gran parte de las minas reanudaron su actividad a principios de marzo y comenzaron a exportar productos. Adicionalmente, a finales de febrero el gobierno anunció proyectos por $9 mil millones para impulsar la economía.
El PIB
Los datos más recientes publicados por el Banco Central de Reserva del Perú reportan una caída de 1,1% en el PIB en enero de este año en comparación con el mismo mes de 2022. Es la primera contracción del PIB mensual en 22 meses.
Las protestas callejeras registraron su máxima intensidad en enero y han impactado en el desempeño de la economía. Uno de los sectores afectados por las protestas y de mucho peso en la economía peruana es la minería que retrocedió 3,6%.
Perú depende en gran medida de la actividad minera la cual representa el 60% del valor total de las exportaciones del país. Algunas minas debieron cerrar sus operaciones en enero o disminuir su producción debido a cortes de rutas o ataques directos a sus instalaciones como San Rafael de Minsur en Puno, Las Bambas en Apurimac y Antapaccay en Espinar.
Otros sectores afectados fueron hidrocarburos (-3,5%), construcción (-11,7%) y manufactura no primaria (-3,3%).
Este viernes el Banco Central de Reserva del Perú informó que bajó su estimación de crecimiento económico para este año a 2,6% desde el 2,9% anterior, manteniendo en 3,0% su proyección para el 2024. En el sector minero, el organismo estima una caída en la inversión del 16,7%.
Inflación y tasas de interés
La reciente conflictividad social y los bloqueos de carretera han impactado también en los precios de los alimentos y por consiguiente están acelerando la inflación. En 2022 la inflación terminó en 8,46% según cifras del BCRP, el nivel más alto en 24 años.
En los primeros dos meses de 2023 esta tendencia se ha mantenido. La inflación de doce meses hasta febrero fue de 8,65% vs 6,15% en febrero de 2022. Algunos productos básicos como arroz, aceite comestible y trigo incluso han duplicado su precio.
En un intento de frenar la inflación el BCRP ha incrementado la tasa de interés de los certificados de depósito, desde un 3,0% en enero de 2022 hasta 7,8% en marzo de este año.
El BCRP ha informado que espera que la inflación comience a bajar y mantiene una meta de un máximo de 3% para todo el año, lo que a todas luces parece una meta optimista. Los resultados de la Encuesta de Expectativas Macroeconómicas de Inflación correspondientes al 28 de febrero y que incluye lo esperado por analistas económicos, el sector financiero y empresas no financieras ubican la inflación entre 4,0 y 5,5% para este año.
El precio del dólar en el mercado interbancario había alcanzado un máximo de 3,991 pesos por dólar en octubre de 2022 y el 24 de marzo cotizaba a 3.774 pesos por dólar, 5,4% menos. La economía peruana seguirá impactada este año por los acontecimientos políticos y no se prevé estabilidad hasta la realización de elecciones.